Jacoba Martínez García nació en Tarazona, provincia de Zaragoza (España el 30 de diciembre de 1877. Sus padres fueron Gabino Martínez y Luisa García.

Los años de su adolescencia los pasó en Torrellas y Corella, acompañando a su hermano sacerdote en la atención de los enfermos y en la educación de los jóvenes.

Ingresó al Carmelo descalzo de Guadalajara en 1898 y profesó como religiosa el 15 de octubre de 1899, cambiando su nombre por María Pilar de San Francisco de Borja.

Cuando estalló la guerra civil, las monjas buscaron refugio en casas de familias amigas del monasterio. María Pilar se dirigía con dos compañeras, María Ángeles de San José y Teresa del Niño Jesús, a una de estas casas y de camino, una miliciana reconoció a las religiosas e incitó a sus compañeros a disparar contra ellas. Era el 24 de julio de 1936.